Sigo creyendo en ese lugar, así lo he elegido.
Sí, estoy de acuerdo en que la vida es dura en general,
y no sé si me gusta cantar al amor y a la felicidad,
pero da sentido, textura y color a mi existencia.
Por otro lado, una necesidad subjetiva,
me hace sentarme con las imágenes, las letras y las cargas del camino.
Hay algunas cosas, que no salen de la consciencia,
vienen de otro lugar...