domingo, 5 de julio de 2020

Martina y el mar



Había una pequeña aldea a orillas del Mar Cantábrico, donde el viento del norte modelaba los corazones de los amantes. Un día después de la luna llena, los delfines bailaron para los dos, y ella empezó a nacer.

Los egregores se dispersaron, la magia inundó el lugar y la vida se podía sentir dentro de ella. Las sirenas cantaban sus mejores melodías en la isla de la lámpara maravillosa y los charranes venidos del Ártico revoloteaban luciendo sus mejores galas, para mostrar sus respetos y adorar, con todas las criaturas de la creación, a Martina y el mar.